Las puertas automáticas son elegantes y prácticas. Confieren al establecimiento que las posee un status que lo diferencia, agregándole valor y presencia a cualquier edificio. Están especialmente indicadas para permitir el paso a discapacitados y personas con cochecitos o sillitas de paseo y hacen más ágil el tránsito en cualquier ambiente. También son ideales para espacios climatizados permitiendo un considerable ahorro energético.